jueves, enero 29, 2009

Osamentas

Te deseé tanto y cuando al fin te tuve
elaboré imitaciones de un barro prohibido
para avergonzarme al mirar mi rostro
en el reflejo de mis manos culpables.
Dispersas y rotas quedan tras de mi
las esculturas que ahora me señalan.
Sus rostros inexpresivos persiguen mis pasos,
me alcanzarán y tu ya no estarás conmigo.
Ahuyento huesos mas no se alejan
a pesar que el fango tiene nombre.


Juan Espinoza Cuadra
Enero 2009
México